sábado, 13 de octubre de 2012

Clase - Unidad 3


Visión general de la anatomía y salud laboral del sistema respiratorio y digestivo.

Sistema Respiratorio

La función primordial del sistema respiratorio es llevar aire (con oxígeno) a los pulmones y de allí a la sangre por medio de un intercambio gaseoso ayudado por la inspiración. Su función, a la inversa, es tomar de la sangre el dióxido de carbono, incorporarlo al aire y expulsarlo del sistema en la exhalación.

Así, inspiramos aire para llevar oxígeno (indispensable para la vida) a los pulmones y exhalamos para expulsar el gas de desecho, el dióxido de carbono, un subproducto de la respiración.

Fig. 1: Movimientos respiratorios de la caja torácica.

Este proceso se repite de una 16 a 20 veces por minuto en el adulto y está controlada por el sistema nervioso autónomo que mide constantemente los niveles de oxígeno y CO2 en sangre modificando el ritmo según la necesidad. Alternativamente podemos voluntariamente controlar la respiración por pocos momentos.

La sangre dispone constantemente de oxígeno ya que siempre queda aire en los pulmones luego de exhalar. Al inspirar, el aire penetra por la nariz y la boca hacia la vía respiratoria y los pulmones.

En los pulmones, el oxígeno pasa de los alvéolos (pequeños sacos de aire) a los diminutos vasos sanguíneos (capilares pulmonares). Al mismo tiempo se libera el dióxido de carbono desde los capilares a los alvéolos, que se expulsa al espirar. En trabajo conjunto con el sistema circulatorio este intercambio molecular (oxígeno por dióxido de carbono) se repite a cada una de las células del organismo.

Fig. 2: Principales constituyentes
                                            del sistema respiratorio humano.

El sistema respiratorio comprende la boca y la nariz (vías aéreas), la laringe, la traquea, los bronquios, los pulmones (con sus alvéolos y capilares). El diafragma, las membranas pleurales, las costillas y los músculos asociados a ellas protegen y permiten la funcionalidad del sistema.

Vías aéreas: Las cavidades bucal y nasal comprenden las vías aéreas superiores, éstas están revestidas de tejido mucoso susceptibles de inflamarse por medio de reacciones alérgicas, produciendo congestión, estornudos y ojos llorosos. La cavidad nasal se ocupa de calentar el aire que inspiramos por medio de cada una de las vías por donde pasa y lo filtra por medio de los pelos y moco que siempre están presentes en la nariz. Un funcionamiento normal y sin obstrucciones de la cavidad nasal permite mantener un ritmo respiratorio plácido, tranquilo y relajante. Por el contrario, el tener que respirar por la boca crea angustia, sofoco y una gran incomodidad.

Laringe: Constituye nuestro órgano fonador y está compuesto de un armazón cartilaginoso, pocos huesos y musculatura esquelética fina que nos permite, mediante una columna de aire ascendente, emitir sonidos y por ende, el habla. Tanto la cavidad bucal como la nasal terminan en la laringe y en la faringe (que comunica con el esófago), por ello existe una estructura llamada epiglotis que cierra el conducto respiratorio (faringe) mientras tragamos el alimento masticado.

Traquea: es un tubo compuesto de anillos cartilaginosos que conduce el aire hacia los pulmones. En su luz de pueden distinguir células productoras de moco y con cilios que tienen un movimiento ascendente a fin de capturar y expulsar las partículas extrañas del aire inspirado, respectivamente.

Bronquios: se ramifican a partir de la traquea perdiendo sección transversal, dividiéndose y subdividiéndose para formar una red en cada pulmón. Al ramificarse de manera muy pequeña se denominan bronquiolos.

Pulmones: Son órganos esponjosos que pueden contener unos seis litros de aire, siendo cuatro litros en una mujer. Contamos con dos pulmones, el derecho se divide en tres lóbulos, superior, medio e inferior, mientras que el izquierdo solo se divide en dos lóbulos, el superior y el inferior. Allí se encuentran los alvéolos pulmonares, millones de pequeños sacos elásticos de aire donde tiene lugar el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono. Cada alvéolo está rodeado por una red de diminutos capilares sanguíneos. Las delgadas paredes de ambas estructuras permiten al oxígeno difundirse hacia la sangre y al dióxido de carbono desde ella. 

Fig. 3: Unidad respiratoria.

Diafragma: Es una capa de musculo, de forma abovedada, que separa el tórax de las cavidades abdominales. En la inspiración se contrae y aplana aumentando el volumen de la cavidad torácica, mientras que en la espiración, este se eleva para recuperar su forma abovedada de descanso, disminuyendo el volumen del tórax. Su debilitamiento puede ocasionar hernias diafragmáticas, permitiendo que el contenido abdominal ingrese a la cavidad que delimita.

Membranas pleurales: Son dos capas de membranas serosas separadas por liquido lubricante que rodean y protegen a cada pulmón. Un proceso infectivo da lugar a pleuresía, una inflamación por incremento del líquido de mucho dolor. Poseen conexión circulatoria. 

Fig. 3: Dinámica del intercambio de líquidos en el espacio intrapleural.

Costillas y músculos asociados: En la inspiración los músculos asociados a las costillas y del cuello se contraen para expandir la cavidad torácica y los pulmones llenan el vacío, en este punto los alvéolos se expanden y llenan de aire que llega de la tráquea. Las costillas se mueven hacia arriba y afuera mediante la acción muscular. Al contrario, durante la espiración, los músculos se relajan y la pared elástica del pecho recupera su posición de descanso obligando a salir el aire de los pulmones. Las costillas se hunden hacia abajo y adentro al relajarse los músculos.


Aspectos de la Salud Laboral del Sistema Respiratorio.
Las enfermedades pulmonares profesionales son tan comunes que ocupan, no solo el primer lugar, sino las cuatro primeras posiciones de la lista de las enfermedades laborales más frecuentes en países desarrollados. En nuestro país, debido a que aún no iniciamos una industrialización masiva, tenemos aún oportunidad de evitar que esta tendencia en la morbilidad laboral mundial se repita.

Un manejo de la salud laboral preventiva orientada a prevenir los riesgos que generan las enfermedades más comunes tenderá a que evitemos su aparición de manera temprana y nos dará mas beneficios que invertir grandes sumas de dinero en nuestros ya colapsados centro de salud.

La ciudadanos de zonas urbanas inhalan 2mg de polvo al día, en los trabajadores de empresas donde las partículas en suspensión se mantienen constantes, industrias del cemento y de la construcción, por ejemplo, esta cantidad de polvo inhalado puede aumentar de 10 a 100 veces. E

El sistema respiratorio puede proteger de estas inhalaciones nocivas reaccionando para evitar la mayoría de las enfermedades, pero si la inhalación es frecuente, es diaria, puede darse lugar a respuestas agudas y hasta crónicas. Si a esto le sumamos el exponerse a humos del tabaco y a vapores y gases nocivos, no resulta extraño el contestar el porque las enfermedades pulmonares ocupan ese “sitial de honor” en la epidemiología laboral.

Según el sitio del sistema respiratorio donde se deposite el elemento nocivo, su dosis, la duración de la exposición, la susceptibilidad celular pulmonar derivada de la genética y fisiología del individuo y la alteración de los mecanismos de defensa del huésped que en algún momento dado se supriman y lo hagan vulnerable, este golpeado sistema respiratorio va a generar respuesta agudas; que pueden ir desde una simple obstrucción parcial, broncoconstricción, alveolitis o edema pulmonar, y respuestas crónicas como asma, fibrosis parenquimatosa y hasta cáncer.

Fig. 4: Alteraciones de los alvéolos pulmonares en la neumonía y en el enfisema.

El diámetro de la partícula de polvo y el estado fisiológico del individuo va a determinar en que parte del sistema respiratorio se alojará una u otra partícula. 

Tabla 1: Localización de las partículas inspiradas en el sistema respiratorio según su diámetro y estado fisiológico.
Diámetro partícula (μm)
Parte del
Sistema
Respiratorio
Estado
Fisiológico
del Individuo
>10
Mucosa nasal
Reposo
10-20 (20%)
Laringe y Traquea
Ejercicio vigoroso
3-10
Traquea, Bronquios*
Reposo y Ejercicio
0,1-3
Alvéolos**
Reposo y Ejercicio
<0,1
Corriente aérea
Reposo y Ejercicio
* Esta ubicación es favorecida por mayor flujo inspiratorio, obstrucción de vías superiores y
mayor cantidad de moco.
**Se han encontrado en los alvéolos con frecuencia fibras de mucha mayor longitud que el
diámetro mostrado en esta categoría, debido a que su sección transversal muestra un diámetro que si encaja.

Como es comprensible, según la ubicación de la partícula una y otra parte del sistema respiratorio que se verá afectada en mayor o menor grado.

Por otra parte, el efecto de los gases y vapores sobre cada una de las estructuras del sistema respiratorio obedecerá a sus características químicas, además de secuestrar y desplazar el oxígeno ambiental que debería estar entre 22-23% del total de gases en el aire.

Los gases hidrosolubles, como el amoníaco y el dióxido de azufre primordialmente se ubicarán en la capa acuosa de la nariz, en la bucofaringe y en las vías respiratorias superiores en general, afectándose negativamente estas estructuras.

Si los gases o vapores son de naturaleza no hidrosolubles, tales como el dióxido de nitrógeno y el fosgeno, evadirán los filtros acuosos de las vías aéreas superiores y causarán el daño distalmente, en los alvéolos.

Por esta razón, y debido a la dificultad de evaluar de manera certera tanto al susceptibilidad celular pulmonar como la alteración de los mecanismos de defensa de cada individuo, se deben proteger mediante los carteles de advertencia y equipos de protección a todos los trabajadores potencialmente expuestos al polvo, gases y vapores.

Hay profesiones que tenderán a afectar más a los sistemas respiratorios de los individuos que las ejercen. Los miembros de los equipos de salud se hallan frecuentemente expuestos a virus, bacterias y esporas de hongos que tienen la capacidad de mantenerse en suspensión por lo que la morbilidad de sus puestos de trabajo debe ser compensada en medidas especiales para evitar la virulencia.

Los operadores de hornos industriales de ciertas empresas de alimentos; como las que fabrican embutidos, donde se emplean sustancias cancerígenas “atomizadas”, el humo líquido (sustancia que le da ese aspecto dorado y ligeramente quemado que tanto gusta en los productos ahumados); se exponen a diario a vapores calientes impregnados con dichas sustancias nocivas, aumentando su tendencia a sufrir respuestas agudas y crónicas en sus sistema respiratorio.

Los trabajadores mineros, expuestos a tantos agentes nocivos y al aire enrarecido, los que laboran en túneles, canteras de mercurio, fábricas donde se emplea plomo, entre otros entornos son el objetivo de los profesionales de la salud laboral especializados en prevenirle a los trabajadores enfermedades del sistema respiratorio. 

Fig. 5: A. Ventilador para respiración artificial. B. Respirador de Tanque - “Pulmón de Acero”

No solo los riesgos biológicos y químicos pueden afectar a los componentes del sistema respiratorio. El exponerse de manera habitual a cambios bruscos de presión y temperatura los afectarán también con consecuencias desfavorables. Los buzos soldadores de nuestra industria petrolera son compensados con jornadas laborales de pocas horas (2 horas diarias) debido a que se someten rutinariamente a una diferencia de presión de oxígeno entre la atmósfera y la mezcla de gases del tanque de buceo con que laboran.

Los que ejercen sus funciones y oficios en cavas refrigeradas de procesamiento y almacenamiento de alimentos o sus materias primas, se enfrentarán a enfermedades laborales asociadas a estos cambios bruscos de temperatura y a la inspiración de partículas en suspensión de las materias primas que sean añadidas en la elaboración de los alimentos por lo que se hace necesario la protección adecuada para cada caso particular.

A continuación una lista con las enfermedades más frecuentes generadas por el entorno laboral: Amigdalitis, Asma, Bronquitis, Enfisema, Esclerosis Pulmonar, Pleuresía, Neumotórax y Neumoconiosis.

Sistema Digestivo.
El sistema digestivo está constituido por un tubo largo y sinuoso que atraviesa todo el cuerpo. Su función es proveer al organismo de los nutrientes y agua necesarios para el funcionamiento de sí mismo y de todos los otros sistemas que componen el cuerpo humano.

Para ello realiza la digestión, proceso químico que consiste en el desdoblamiento de las macromoléculas ingeridas hasta convertirlas en moléculas útiles al metabolismo celular.

Este tubo grande y sinuoso comprende las siguientes estructuras: boca, faringe, esófago, estómago, intestino delgado, intestino grueso, ano. Además cuenta con órganos como el hígado, el páncreas y la vesícula biliar que vierten sus secreciones dentro del tubo contribuyendo al proceso digestivo.

Todo el conjunto está revestido en la cavidad abdominal por el peritoneo.

 Fig. 6: Aparato digestivo.

Boca: en la cavidad bucal ocurre la masticación, proceso mecánico por mediante el cual se trituran los alimentos a fin de aumentar su relación superficie-volumen de tal manera que se vean mucho más expuestos a las enzimas digestivas. En la 
boca es secretada la amilasa, por las glándulas salivales. Esta enzima comienza la transformación química de un carbohidrato de almacenamiento vegetal, el almidón, la cual va a ser completada en el intestino delgado.

Faringe: Es una estructura en forma de tuvo que ayuda a respirar y está situada en el cuello y revestido de membrana mucosa. Ella conecta la nariz y la boca con la laringe y el esófago por lo que es un área de transición por donde pasa aire y alimentos. Forma parte tanto del sistema respiratorio como del sistema digestivo. Mide unos trece centímetros en el ser humano y se divide en nasofaringe, orofaringe y laringofaringe. Estas dos últimas regiones de la faringe están delimitadas por una estructura cartilaginosa, la epiglotis. Esta obstruye el paso del bolo alimenticio al momento de la deglución evitando que este ingrese al sistema respiratorio.

Esófago: Es un tubo largo y recto que comienza en la faringe y termina en el estómago. Conduce los alimentos y líquidos que salen de la faringe hasta el estómago por medio de movimientos peristálticos y esfínteres que hacen que sea posible deglutir en ausencia de la gravedad y también de cabeza.

Estómago: Es un saco medianamente flexible, cuenta con membranas mucosas que segregan ácido clorhídrico y tiene un volumen en el adulto en reposo de 75 cc. Una vez distendido, luego de una gran comida, puede aumentar su volumen hasta alcanzar los dos litros (2000 cc). Esto es posible gracias a que la inervación del estómago en caso de llenura segrega unas moléculas que activan unas proteínas incrustadas en la pared estomacal, permitiendo su distensión. El bolo alimenticio es convertido en quimo dentro del estómago por medio de la secreción ácida y los movimientos peristálticos que realiza. En el estómago se segregan diversas hormonas, como la grelina, que envía una señal al sistema nervioso para que se tenga apetito. En el estómago comienza la digestión de los lípidos y de las proteínas por medio de las enzimas del jugo gástrico.

Fig. 7: Anatomía fisiológica del estómago.

Intestino delgado: Todo el quimo que sale del estómago ingresa al intestino delgado. Este es un tubo muy largo de unos 3-4 metros de largo (7-8 metros en el cadáver humano) que se inicia en el extremo distal del estómago y termina en el ciego del colon. Se divide en tres sectores, duodeno, yeyuno e íleon, según su morfología y fisiología particular. En el intestino delgado ocurre la absorción de los nutrientes provenientes de los alimentos ingeridos. El quimo, bolo alimenticio transformado por acción del ácido clorhídrico del estómago, es mezclado con las secreciones biliares, pancreáticas e intestinales para convertirse en el quilo, objeto de la absorción intestinal. La pared interior del intestino delgado cuenta con pliegues y vellosidades que permiten un íntimo contacto con el quilo facilitando así la absorción de moléculas desdobladas de grasas, proteínas y carbohidratos.

 
Fig. 8: Corte longitudinal del intestino delgado que muestra las válvulas
conniventes cubiertas por vellosidades.

Intestino grueso: Es un tubo de mayor sección transversal que el presente en el intestino delgado y se divide en colon ascendente, transverso, descendente, sigmoide y ano. Su función principal es conducir todo el material no digerido al exterior del organismo por medio del ano en un proceso que se llama, defecación. El material no digerido va perdiendo agua a medida circula por el intestino grueso, agua que es recuperada al organismo.
Fig. 9: Funciones de absorción y almacenamiento del intestino grueso.

ígado: Es la más grande de las vísceras y una de las más importantes por su actividad metabólica. Es un órgano glandular al que se adjudica funciones muy importantes, tales como la síntesis de proteínas plasmáticas, función desintoxicante, almacenaje de vitaminas y glucógeno, además de secreción de bilis. Es el órgano responsable de eliminar de la sangre las sustancias que puedan resultar nocivas para el organismo.

Páncreas: Es un órgano exocrino que segrega enzimas digestivas que pasan al intestino delgado. Además es endocrino debido a que produce hormonas, como la insulina, el glucagón y la somatostatina que pasan a la sangre.

Vesícula biliar: Se conecta con el intestino delgado (duodeno) por la vía biliar común o conducto colédoco. Su función es la acumulación de bilis, contiene un volumen de alrededor de 50 ml. de bilis que libera al duodeno. Está unido visceralmente al hígado.

Peritoneo: Es una membrana que envuelve la mayor parte de los órganos del abdomen. Está formado por dos capas de tejido conectivo, el peritoneo parietal, adherido a la pared intestinal y el peritoneo visceral, que envuelve y rodea cada una de las vísceras. Entre ambas capas se encuentra un liquido lubricante que permite el movimiento entre ellas.

Aspectos de la Salud Laboral del Sistema Digestivo.

La vida moderna sin duda ha afectado el ritmo al cual nos alimentamos e hidratamos. Las grandes exigencias de las jornadas laborales de hoy en día nos deja muy poco tiempo para planificar nuestra alimentación y mucho menos para un buen reposo luego de las comidas.

Escasamente masticamos los alimentos que ingerimos y prioritariamente elegimos aquellos que no parezcan mas apetitosos, favoreciendo el abuso de especias, condimentos y grasas sin tomar en cuenta el valor nutritivo y equilibrio que toda ingesta debe tener.

Usamos sustancias estimulantes del sistema nervioso central como el café, té y el tabaco a fin de seguir con un buen estado de alerta que nos permita mantener nuestra eficiencia y eficacia en el trabajo, con todas las consecuencias negativas que de su consumo de derivan. La hidratación y la defecación son algunos de los aspectos de nuestra fisiología que sin duda han sido más afectados por los horarios de trabajo.

En muchos establecimientos donde laboran trabajadores, la hidratación no es fácil debido a que no hay ni permiso ni agua potable fácilmente accesible para todos los que están trabajando, a pesar que en la ley este aspecto esta garantizado. Dos evacuaciones diarias no solo son deseables sino necesarias a fin de que nuestro intestino esté lo más despejado posible, sin embargo el ritmo de nuestras vidas nos ha condicionado a que este aspecto de nuestro proceso digestivo se restrinja a una sesión, casi siempre ejecutada bajo la presión de nuestra apretada agenda.

No solo el horario y el uso del tiempo afecta a nuestros sistemas digestivos, también el aspecto emocional juega un papel fundamental en su equilibrio. La presión por ser cada vez más productivos lleva a muchas personas a estados de nerviosismo que afectan la “calma” intestinal, estomacal y del colon, pudiendo aparecer úlceras e irritaciones donde antes no existían, de allí que un anhelo de muchos es ser “su propio jefe” tener un negocio que lleve a su propio ritmo y la exigencia venga de su propia iniciativa, afectando muy poco a todos sus sistemas, en especial al digestivo.

En fin, a la mayoría de las enfermedades del sistema digestivo es difícil atribuirle un origen laboral debido a que la conducta del trabajador casi siempre está involucrada, sin embargo podemos hacer mención de algunas que si bien, no podrán ser objeto de una indemnización, si podemos prevenir su aparición, mediante un manejo adecuado de los riesgos que las generan.

Entre ellas tenemos: Colecistitis, Dispepsia, Dolicocolon, Estreñimiento, Entero-Colitis (diarreas), Gastritis, Hernias Digestivas, Megacolon y Úlcera Péptica.

Fig. 10: Úlceras pépticas. H. pylori: Helycobacter pylori.





 
 

 
 
 

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Clase - Unidad 2

Anatomía. Concepto. Divisiones.
“ana”: división, hacia arriba “tomía”: cortar. El término anatomía fue acuñado a fin de hacer referencia al estudio del cuerpo humano por medio de la separación de sus distintas partes infringiéndole cortes al mismo y hasta de manera clandestina. 



 

 Fig. 1:Lección de anatomía antigua. Rembrandt.




El siglo pasado (1966) se realizó una película de ciencia-ficción, “Viaje Alucinante”  que trata sobre una incursión al interior del cuerpo humano, lográndose, por medio de efectos especiales, ilustrar que les sucedería a las personas si pudiesen ser miniaturizados y se introdujesen dentro de las estructuras anatómicas vivas.

Fig. 2: Cartel de la película “Viaje Alucinante” del director Richard Fleischer (1966).


En la actualidad la anatomía se enseña en los anfiteatros de las escuelas de medicina por medio de cortes y separaciones que los estudiantes les realizan a cadáveres en estado de preservación con formol. Para su aprendizaje se emplean también modelos del cuerpo humano o de alguna de sus estructuras confeccionados en plásticos o alguna resina sintética lográndose bastante “realidad” en las preparaciones.




Fig. 3: Modelo anatómico del esqueleto humano.
El llamado “Dr. Muerte” es conocido mundialmente debido a su gran colección de cadáveres donados a la ciencia que están diseccionados con gran laboriosidad y detalle empleando sustancias  que preservan las estructuras con movilidad y/o rigidez según lo requiera permitiéndole incluso lograr posturas  “vitales ” e incluso “sociales” en sus preparaciones cadavéricas. El “Dr. Muerte” recorre el mundo a manera de un circo ambulante con su interesante y educativa colección.



Fig. 4: Preparación osteo-muscular para exhibición del llamado Dr. Muerte, Dr. Jack Kevorkian. 

Otra manera que se ha hallado para estudiar la anatomía es por medio de la bioscópica, “bio” vida y  “oscópica” desde lejos, hacen referencia al estudio de las estructuras internas del cuerpo humano por medio de proyecciones imaginativas de las mismas, partiendo de elevaciones y/o depresiones visibles en la piel. 
Hoy el estudio de la anatomía es posible incluso realizarlo virtualmente, con alto detalle por medio de computadoras, todo esto gracias a personas que donaron su cuerpo a la ciencia y los encargados de “aprovechar” tal donación hicieron escaneos muy finos en diversos planos por medio de un tomógrafo, vaciando toda esa información bidimensional en ordenadores para estructurarla en atlas tridimensionales permitiendo contar hoy con modelos virtuales en tres dimensiones con altísimo detalle y realismo de las estructuras anatómicas.
Un ejemplo de las experiencias virtuales que se pueden obtener hoy en día se puede ver en la siguiente página web:
La anatomía puede dividirse en descriptiva; cuando estudia el cuerpo humano mediante sistemas, clínica; cuando su fin es lograr un diagnóstico, comparada; cuando permite relacionar estructuras con otros organismos no humanos o durante los cambios evolutivos o filogenéticos, microscópica o histología; cuando se emplea el microscopio para estudiar tejidos y células, del desarrollo; cuando describe los cambios en las estructuras a medida que se suceden los cambios ontogenéticos,  funcional o fisiología; cuando su fin es comprender el funcionamiento de tejidos, sistemas y órganos,  quirúrgica; la empleada por los cirujanos, radiológica; que guía la obtención de imágenes y, patológica; que estudia el deterioro de los órganos.

Es de suma importancia al estudiar anatomía ubicar la pieza o cadáver de manera correcta en el espacio. A partir de la posición anatómica, posición del cuerpo humano que se ha hecho convención a nivel internacional a fin de describir de igual manera una estructura u órgano, se generan planos y regiones útiles en la descripción.



Fig. 5: Posición anatómica describiendo las diversas regiones del cuerpo humano
                               que surgen al describir planos en él (Midline = línea media)

Plano sagital: un plano único que divide al cuerpo humano en dos mitades simétricas, pasa por la nariz, mitad del cuello, el ombligo, entre los glúteos, por la columna vertebral y termina en los genitales. Las estructuras que se acerquen al plano sagital son mediales, y las que se alejen de él son laterales.

Plano coronal: es un plano único que divide al cuerpo en dos mitades asimétricas, mitad anterior o ventral y la posterior o dorsal. Pasa por el pabellón auditivo, hombros, caderas y por las piernas por la zona de costura del pantalón hasta los pies.

Plano transverso: son planos múltiples e infinitos que dividen al cuerpo en mitades asimétricas.  Sirve como referencia de un plano transverso uno que pasa por ambas tetillas pectorales y completan el recorrido en el centro de la espalda pasando por ambos huesos omóplatos. Si usamos una salchicha o chorizo como modelo del cuerpo humano, los planos transversos serán aquellos que resulten de cortarlos en rodajas. Los planos transversos son muy útiles ya que nos dan puntos de referencia instantáneos para ubicar estructuras.

Todo lo que esté por encima (hacia la cabeza) de un plano transverso es “superior a”. De igual manera todo lo que esté por debajo (hacia los pies) de un plano transverso es “inferior a”. Para las extremidades todo lo que esté por encima de un plano transverso es “proximal” mientras que todo lo que esté por debajo de un plano transverso es “distal”. 

Visión general de la anatomía del aparato locomotor.

Sistema Óseo.
El esqueleto humano constituye una maravilla biomecánica que ha servido de inspiración al hombre desde hace mucho tiempo. Muchas máquinas actuales contienen piezas similares a las encontradas en el esqueleto y funcionan con principios mecánicos deducidos del funcionamiento del mismo a través de la biónica. El esqueleto humano es una estructura que le da soporte al organismo, protege órganos vitales y permite la locomoción, esta última función en conjunto con el sistema muscular.
Un recorrido somero por las estructuras del esqueleto bien puede comenzar por los huesos de la cabeza.

El Cráneo y la Mandíbula

Fig. 6: Huesos del cráneo humano en vista lateral.
El cráneo es un conjunto de huesos en la cabeza que forman una bóveda que encierra y protege al sistema nervioso central. Este está compuesto anteriormente por un hueso frontal, lateralmente por dos huesos temporales y dos huesos parietales y posteriormente por un hueso occipital. El cráneo está “apoyado” sobre el hueso maxilar superior que sirve de asiento a la dentadura superior. Debajo a este hueso se articula el hueso maxilar inferior que junto la dentadura inferior forman todo el conjunto de dientes de la boca. Por encima del maxilar superior se encuentran los orificios de los ojos u órbitas y los correspondientes a la nariz.

Tórax, Pecho y Hombros 
Las costillas forman la llamada caja torácica que contiene y protege órganos vitales como el corazón y los pulmones, son 12 pares de costillas, 10 de ellas están articuladas anteriormente por medio de cartílago a al hueso esternón. A éste también se articulan un par de huesos a nivel superior que se denominan clavículas, que junto con los húmeros (de las extremidades superiores) y omóplatos forman la cintura escapular.



Fig. 7: Huesos que componen la Caja torácica.

Extremidad superior.
La región de la extremidad superior por donde está ubicado el hueso húmero se denomina brazo, mientras que este hueso se articula distalmente con dos huesos, el cúbito y el radio, formando el antebrazo. La muñeca está compuesta por una serie de huesos denominados carpianos, de igual forma la palma de las manos está compuesta por 5 huesos metacarpianos cada una y luego siguen distalmente las falanges que constituyen el soporte de los dedos. Es de hacer notar que hay 3 falanges por cada dedo de las manos a excepción del pulgar que tiene dos.

Fig. 9: Huesos que componen la extremidad superior.

Cadera y Extremidades Inferiores
La cintura pélvica está compuesta por dos conjuntos grandes de huesos, Ileon, Isquion y Pubis, en la cadera unidos frontalmente por la sínfisis púbica, éstos a su vez articulan con el fémur, el hueso más largo del cuerpo que forma la región del muslo, luego este hueso articula distalmente con la tibia, el peroné y un hueso ovoide llamado rótula, siendo esta articulación límite entre la región del muslo y la pierna.
Al final de la pierna, la tibia y el peroné articulan con un conjunto de huesos similar al que forman la muñeca, los tarsianos, el mayor de los cuales forma el talón, éste en particular se llama astrágalo. De igual manera que en la muñeca, los tarsianos en posición más distal articulan con los huesos metatarsianos dándole soporte a la planta del pie, luego estos articulan con las falanges de los dedos del pie, siendo tres en los dedos laterales y dos falanges en el pulgar.



  
Fig. 10: Huesos que componen la cadera y las extremidades inferiores.

Tipos de Huesos y de Articulaciones
Los huesos son estructuras rígidas en los adultos y algo flexibles en los niños compuestos por minerales calcio y fósforo. A pesar de lo que normal e intuitivamente se piensa los huesos son estructuras compuestas por células vivas, los osteocitos, son irrigados y se regeneran. La densidad de los minerales que lo componen determina su dureza y ésta varia de una persona a otra según su genética y nivel de ejercitación. Es ilustrativa la situación en que las personas con poco uso de sus musculatura, como los postrados en camas debido a enfermedades o los astronautas que permanecen meses en el espacio,  pierdan densidad ósea y experimenten fracturas con mucha mayor facilidad que el resto de las personas. La osteoporosis es una perdida progresiva de la densidad ósea que aparece a edad avanzada, sobretodo en las mujeres, la cual es parcialmente revertida y detenida mediante la administración oral de calcio y hormonas que promueven su incorporación en los huesos. 


Fig. 11: Tipos de hueso.
 Los huesos se dividen en planos, cortos y largos dependiendo de sus dimensiones y formas. Ejemplos de huesos planos son los huesos que componen el cráneo. De huesos cortos podemos mencionar las vértebras o falanges y de ejemplos de huesos largos podemos nombrar al fémur, la tibia, el peroné, el húmero, cubito y radio.

Las articulaciones pueden ser fijas, como las de los huesos planos del cráneo, cuyo movimiento es limitado o nulo. Otro tipo de unión entre huesos es la articulación semi-móvil, cuyo ejemplo característico es la de las vértebras en la columna. Tenemos también articulaciones que se permiten el movimiento sin rotación como la formada por el húmero, cúbito y radio, este tipo de articulación es llamada de movimiento en bisagra.  La que mayor movilidad permite es la articulación móvil o enartrósica, como la del húmero en la cintura escapular, permitiendo su movimiento en casi todas direcciones.

Toda articulación móvil tiene un conjunto de elementos que garantizan un movimiento fluido de sus huesos componentes. Uno de esos elementos lo constituye los ligamentos, que son haces de tejido fibroso fuertemente anclados a pequeñas elevaciones o depresiones de los extremos de los huesos que permiten unirlos entre sí. El cartílago es otro de estos elementos favorecedores de la función articular y consiste de un tipo de estructura que rodea los extremos de los huesos y tiene la particularidad de que la región del cartílago que va a tener roce con el cartílago de otra pieza ósea es muy lisa, reduciendo la fricción durante el movimiento. La bursa o capsula periarticular rodea todo el conjunto conteniendo un líquido viscoso que funciona a manera de lubricante de todos los elementos, el líquido sinovial.

Fig.12: Articulación de la rodilla.

Cuando un hueso cambia su posición habitual parcial o totalmente, ya sea por enfermedad o trauma, del conjunto del cual está formando parte en una articulación, se puede hablar de una dislocación. En estos eventos tantos los ligamentos como la capsula periarticular puede sufrir desgarro o daño ocurriendo frecuentemente inflamación,  limitándose la movilidad de la zona afectada y causándose mucho dolor. Los lugares más comunes en los que ocurren las dislocaciones son: el hombro, pulgar, dedos, mandíbula y columna.   

Columna vertebral
La columna vertebral es un armazón óseo que se ubica al centro del cuerpo y por encima de la cintura pélvica, la cual rodea por detrás. Comienza con siete vertebras cervicales a nivel del cuello, estando las dos primeras fusionadas para formar un pivote al cráneo. Le siguen doce vertebras dorsales, cinco vertebras lumbares y cinco sacras fundidad y 4 coxígeas fundidas. Desde la primera vértebra cervical hasta la quinta sacra hay ramificaciones nerviosas por su asta posterior. Los discos intervertebrales se componen de cartílago y están ubicados entre cada dos vértebras y permiten amortiguar choques y absorber el impacto que pueda sufrir la columna durante el funcionamiento del cuerpo.



Fig. 13: Columna vertebral
Las hernias discales consisten en protrusión parcial o total de estos discos intervertebrales debido a inadecuada o excesiva carga de peso. La función más importante de la columna vertebral es proteger a la médula espinal, ese cordón nervioso que atraviesa cada una de las vértebras.

La columna tiene una curvatura natural en forma de doble “S” suave cuando se explora en plano sagital. Existen deformidades que comprometen esta curvatura natural perjudicando el funcionamiento de la médula y de los nervios de que salen y entran de ella. Como ejemplo de estas deformidades podemos mencionar a la cifosis, en la cual la primera curva o la superior de la doble “S” de la columna esta muy leve, inexistente o en el peor de los casos hacia un plano anterior del cuerpo, lo cual frecuentemente es ocasionado por la adopción de posturas inadecuadas. Forma la coloquialmente denominada, “joroba”.

Cuando se explora en plano coronal a la columna vertebral ella debe ser muy recta y si se quiere presentar simetría medial. En ocasiones de manera congénita o por la adopción de posturas inadecuadas, sobretodo cuando se está sentado, puede aparecer una curvatura en la columna en este plano, lo cual se denomina, escoliosis,  causando dolor cuando hay exigencias de la columna y en locomoción rápida (al correr). Una causa frecuente de escoliosis es la diferencia en la longitud de los miembros inferiores, causando una posición anormal sobretodo de las vértebras lumbares.         

El dolor de espalda puede originarse a nivel cervical por compresión de nervios dorsales  producto de posiciones rígidas mantenidas por tiempo prolongado, dicho estado provoca que la musculatura  de la zona se fatigue provocando tal compresión nerviosa de gran dolor y molestia. La zona lumbar puede generar dolores de espalda (lumbago) también por dislocación, protrusión o hernia de los discos intervertebrales o de alguna vértebra comprimiendo o irritando alguna raíz nerviosa. Cuando el dolor se proyecta hacia el glúteo y parte posterior de la pierna puede haber una compresión anormal del nervio ciático generándose ese patrón doloroso llamado coloquialmente “la ciática”.  Permanecer mucho tiempo doblado, levantar pesos muy grandes y de manera inadecuada, el ejercicio forzado o caídas extrañas pueden causar dolores de espalda.

Sistema Muscular.
Los músculos son haces fibrosos contráctiles rodeados por una vaina o fascia que termina en bandas de tejido fuerte y fibroso sus extremos, llamados tendones. Los músculos permiten mover las diversas partes del cuerpo al mismo tiempo que permiten mantener la postura y la estabilidad del cuerpo. Hay tres tipos de músculos en el cuerpo humano. Los músculos esqueléticos que son controlados por la voluntad permiten mover las diversas partes del cuerpo. Estos tienen cuatro características que siempre están presentes. Poseen una (o varias) inserción(es) proximal, una (o varias) inserción(es) distal, inervación e irrigación. Según el número de  inserciones que tenga el músculo en un hueso, les han llamado, bíceps, tríceps o cuádriceps, si tiene dos, tres o cuatro, respectivamente.






Fig. 14: Musculatura esquelética

Otro tipo de músculo es el que compone la llamada musculatura lisa, de carácter involuntario es controlada por el sistema nervioso autónomo y tiene sus inserciones en los órganos internos, permitiendo su movilidad y reacción ante los diversos estímulos a los cuales son sensibles. El músculo cardíaco es el tercer tipo de músculo y está compuesto por un tejido rítmicamente contráctil sensible a estimulación eléctrica. Los cardiomiocitos (células que componen el musculo cardíaco) responden a un conjunto de células especializadas en transmitir el impulso nervioso a través de las estructuras que forman, llamadas nodos.  
 
Volviendo a los músculos esqueléticos, estos son susceptibles de sufrir calambres. Los calambres son contracciones involuntarias que sufren los músculos causadas por deshidratación excesiva y/o pérdida de iones potasio debido a su uso o contracción repetida, exagerada y durante largos períodos de tiempo, o por un inadecuado o insuficiente calentamiento e hidratación antes del ejercicio. Dichas contracciones repentinas e involuntarias tienden a generar dolor local.

Las torceduras pueden ocasionar desgarre en los tendones y músculos que según su gravedad pueden ocasionar esguinces,  que son rupturas parciales o totales de tendón y/o músculos y amoratamiento profundo de la zona que sufrió la torcedura. Hay edema en horas o días. Si la rotura es completa, el esguince se cataloga como de 3er grado. 

Esquema Terapéutico General de las Lesiones Osteo-Musculares.





Fig. 15: Esquema Terapéutico General de las Lesiones Osteo-Musculares.

Cuando aparecen las lesiones del aparato locomotor se hace necesario otorgar una inmovilización inmediata a la zona afectada, es más, el mismo cuerpo mediante la generación del dolor se encarga naturalmente de la aplicación de esta medida preventiva que detiene la aparición de mayor daño. El médico especialista (traumatólogo) una vez que ha evaluado la gravedad de la lesión puede prescribir la aplicación de frío, calor y/o estimulación eléctrica a fin de disminuir la hinchazón y favorecer una descongestión general de la zona levemente lesionada. Son comunes en los campeonatos deportivos donde hay mucho contacto los rociadores de gas comprimido (spray) con sustancias como el mentol que le da al musculo impactado una sensación de frío que lo anestesia rápidamente. Normalmente se acompañan estas medidas con analgésicos orales de acción central como el ibuprofeno.

Si el dolor no cede con estas medidas o si la gravedad de la lesión lo amerita, el mismo terapeuta podrá prescribir antinflamatorios en forma de cremas como el diclofenac sodico o anestésicos inyectados intramuscularmente como la toxina botulínica, lo cual es común para aliviar los dolores de espalda cervical. Está toxina proviene de un microorganismo, Clostridium sp., y una vez inyectada en ciertos músculos del cuello o de la columna cervical, los relaja disminuyendo así el dolor. El problema de esta toxina es que se metaboliza con el tiempo teniendo que nuevamente ser inyectada al cabo de unos meses. Esta misma toxina es la misma que es empleada también en tratamientos cosméticos para eliminar arrugas faciales.
 
Los esteroides, que son hormonas que favorecen una regeneración rápida de las estructuras osteomusculares, también son empleados en casos en que el dolor no cede con los tratamientos simples de calor, frío o estimulación eléctrica.

Cuando el médico especialista determina que el daño ocasionado por la lesión a las estructuras es poco tratable con estos métodos, indica cirugía a fin de reparar quirúrgicamente la o las partes dañadas. Es de hacer notar que luego de una intervención quirúrgica del sistema osteo-muscular se hace necesario un mayor tiempo de reposo y terapia en el cual el trabajador no deberá cumplir con sus obligaciones habituales.

Definiciones de las Alteraciones Ortopédicas Más Comunes

Distensión: músculo, ligamento o tendón se estiran o empujan en extremos al forzar la articulación más allá de su límite normal de movimiento. Resultan de levantar una carga pesada o soportar una fuerza externa de tracción.
Esguince: el tendón o músculo se distiende tanto que sus fibras internas o su sitio de inserción se rompe. Hay edema en horas o días.


Tendinitis: inflamación de un tendón debido a artritis reumatoidea o lesiones mecánicas.
Tenosinovitis: inflamación de una vaina tendinosa.
Bursitis: inflamación de una bolsa articular, la mas común la sub-acromial (situada en el manguito rotador y el ligamento coracromial).

Fig. 16: Manguito rotador (músculos y tendones).
Miositis: inflamación de los músculos por poliomielitis o por lesión mecánica en la sobredistensión muscular.
Artritis: trastorno en el que las articulaciones se encuentran inflamadas o en condiciones anormales; artritis postraumática, osteoartritis y artritis reumatoide.
Lesiones por tensión repetida: 3/5 partes de todas las lesiones laborales son por traumatismos por tensión repetida. Se relacionan con traumatismos acumulativos (movimientos repetidos al final de la acción) con un componente de fuerza o vibratorio. Causan dolor e inflamación aguda o crónica de los tendones, músculos, cápsulas o nervios. La cicatrización y estenosis transitorias pueden atrapar tendones, nervios y tejido vascular. Afectan, manos, muñecas, codo, hombro y parte baja de la espalda.  

Prof. Javier Campins